CARTA DE NAVIDAD
Me choca que el Rey inicie su mensaje de Navidad abogando por la protección de las clases más necesitadas. Es evidente que quien le ha escrito el discurso tiene la intención de presentar una imagen cercana a las clases desfavorecidas, para compensar le realidad de la institución monárquica: enriquecimiento personal, lujo, cacerías, yates, vacaciones a todo tren etc. La manera de que los excluidos tengan su papel en la sociedad es primeramente suprimir la superioridad innata que conlleva la corona, para empezar a construir una sociedad verdaderamente igualitaria sin ningún privilegio de sangre.
Toda la pompa de presidir asociaciones y fundaciones benéficas es puro teatro, en realidad no ayudan concretamente a nadie. Cualquiera que necesite alguna ayuda puede hacer la prueba, puede escribir a Doña Sofía como presidenta de alguna de estas fundaciones y ver la respuesta que obtiene, si es que obtiene alguna. Las propias instituciones democráticas están alejadas de la realidad de los desfavorecidos, ¡cuánto más no lo estará la institución monárquica!
Escuchando el mensaje del Rey me da la impresión de que nos tratan como a niños pequeños, de que juegan con nuestras ilusiones y nuestro futuro para asentarse en el poder y los privilegios.
Este mensaje, vacío y sin ninguna intención de realizar nada concreto para llevar a cabo los propósitos que anuncia, podrá quizá causar algún impacto en aquellos que nunca hayan sufrido de verdad la exclusión de que habla el Rey. Pero para los que hemos tenido que soportar la marginación social y laboral a pesar de nuestra valía, para los que hemos sufrido el desprecio de las clases privilegiadas y a veces de toda la sociedad; estas palabras, proviniendo de alguien que se ha enriquecido extraordiamente desde que ostenta su cargo, son un insulto, una ofensa, un agravio, que solamente nos lleva a luchar con más fuerza por el advenimiento de una sociedad republicana, más justa e igualitaria, donde sea el poder emanado verdaderamente del pueblo el que trabaje para evitar la marginación y no se utilice este tema descaradamente para perpetuar privilegios excluyentes.
También me subleva que el Rey aluda a la educación como un medio de promoción personal, y que propugne en este sentido aumentar su calidad. Si no entendemos la cultura y la educación coma la base de la formación del hombre, con la finalidad de construir una sociedad libre y con criterio, jamás promocionaremos la calidad de la enseñanza; continuará siendo una manera de obtener posiciones sociales y laborales, evitando su componente fundamental de valor humano, sin el cual el esfuerzo que requiere la cultura carece de sentido.
Un mensaje abogando por la igualdad pronunciado por quien ostenta los más infundados privilegios es realmente gracioso.
!FELIZ 2008 A TODOS!
4 comentarios
Manuela -
El principal obstáculo para erradicar la corrupción de la vida pública es que los propios ciudadanos la toleran y la ven como inevitable. En el pueblo está profundamente arraigada la idea de que quien llega al poder aprovechará esta circunstancia para enriquecerse. Precisamente esto es lo que ha hecho el actual jefe del Estado, que desde su nombramiento se ha convertido en una de las principales fortunas del país, acumulando un patrimonio personal muy superior al de personajes de la talla de Julio Iglesias. Por lo tanto si este es el ejemplo que ha difundido el rey, ¿qué no estarán dispuestos a hacer y tolerar sus súbditos, tanto políticos como ciudadanos? Quizá para quien está al margen de la vida política activa, la corrupción sea un problema ilusorio; pero yo estoy en contacto constante con las decisiones que se toman en los ayuntamientos de mi comarca y de otros puntos del País y puedo constatar que la corrupción y los despropósitos urbanísticos son el primer eslabón de la cadena que encarece injustamente una necesidad básica como es la vivienda; sin embargo la mayoría de ciudadanos parecen tolerar esta situación resignadamente, a pesar de que hay muhos casos que salen a la luz pública, y no solamente en Marbella.
Es evidente que la desigualdad social no está causada directamente por la monarquía; pero me produce gran sorpresa que esta institución tan poco igualitaria sea la que clame para paliar este problema. Simplemente me suena a discurso hueco y propagandístico.
Y para todos los que estáis dispuestos a tolerar la monarquía a pesar de no estar de acuerdo con ella, solamente veo complacencia en vuestra actitud.
Gracias por vuestros comentarios.
Adrian -
Que no habrá monárquicos plenamente conscientes de la realidad social y el efecto sobre ella de la corona, y sin embargo, la apoyarán. Es cuestión de opinión.
Y no he dicho que esté a favor de su existencia, más bien lo contrario. Digo que empezar por la corona en la lucha contra la desigualdad denota la falta de interés real por el problema ya que salta a la vista que es una parte muy pequeña del mismo.
Quizás es inconsciente seas tu. Ahora si en el mundo, el 20% de la población acumula el 80% de la riqueza será por los reyes... ¿Ahora es cuando toca esto?
¡Basta ya de cinismo! No niego el problema de la monarquía; de su existencia como tal; pero una persona realmente comprometida con el mundo y la sociedad lo tendría muy por abajo en su escala de prioridades.
Santi -
El rei és una cessió dels demòcrates d'aquest país al partit fundat per l'ex ministre franquista, M. Fraga i els partits a la seua dreta.
És en definitiva la resta menyspreable d'una Espanya que ningú amb dos dits de front hauria de voler veure en el segle XXI.
"La inconsciència us farà acrítics" Ego dixit.
Adrian -
Mira a tu alrededor de forma realista y verás que en el segle XXI, no son las coronas las que están acaparando el poder y el dinero, generando las abismales desigualdades que hay hoy en día...